La cultura de diversidad como impulsora de la innovación

Publicación original por: Observatorio de RRHH

Imagen por: Pixabay

Los efectos del impacto de la pandemia aún no se conocen totalmente, y seguirán desarrollándose en los años venideros. Pero todas las señales apuntan a múltiples cambios en el comportamiento del consumidor y del mercado que –en realidad– ya estaban en marcha, y que la pandemia aceleró considerablemente. Esto exige a las organizaciones que aprendan de dichos cambios y se adapten con igual velocidad.

Un ejemplo de esta tendencia lo encontramos en el análisis de la “esperanza de vida” de las corporaciones que forman parte del índice S&P 500, que hoy se sitúa en una media de 20 años, cifra que se espera que se reduzca en un 25% durante la próxima década. Esta tendencia descendente se inició ya en 2015, cuando se registró una media de 25 años.

Así, en palabras de Juan Carlos Cubeiro, “las empresas están desapareciendo a un ritmo vertiginoso y cada vez más acelerado”. Para este experto en talento, coaching y liderazgo –que ha participado en el ciclo de masterclass Analítica, Resiliencia e Innovación organizado por ADP y ORH– lo que tienen en común aquellas que sí triunfan es su creencia en la diversidad.

“El Índice de InnoDiversidad, desarrollado por IE University y Fundación para la Diversidad, demuestra que la diversidad resulta nuclear para la innovación de las empresas. La verdadera innovación está en la cultura, en el modo de hacer las cosas dentro de una organización; y solo puede haber dos tipos de cultura corporativa, la que es verdaderamente diversa y la que –más allá del discurso– no lo es”, afirma Juan Carlos Cubeiro.

Tanto pymes como grandes compañías fomentan la innovación cuando son diversas de verdad; están generando nuevas ideas, nuevos productos y servicios… si una cultura de empresa no recoge la diversidad de género, de edades, de capacidades, de formas de pensar, sentir y aprender… sufrirá mucho en términos de su propia sostenibilidad.

Sin embargo, no todo es diversidad, ya que el verdadero éxito de una cultura que pretenda lograrla se debe basar en valores como la igualdad, la integración y la inclusión. “Una organización no alcanza la diversidad de género por tener una plantilla con el 50% de mujeres”, pone como ejemplo Juan Carlos Cubeiro, “es necesario que todas tengan voz, y eso solo se consigue mediante un liderazgo integrador”.

Por eso, en opinión de este experto, a las empresas españolas aún les queda un gran recorrido por avanzar en este campo “en especial porque tardamos mucho en aprender. Precisamente, la pandemia ha exacerbado los vicios y las virtudes, y aquellas empresas que se toman en serio la diversidad son más innovadoras y generan más valor, mientras que aquellas que se resisten se van quedando atrás”, concluye.

Fuente:

Observatorio de RRHH (2022). La cultura de diversidad como impulsora de la innovación. Observatorio de RRHH. Recuperado de: https://www.observatoriorh.com/orh-posts/cultura-diversidad-innovacion.html